La pandemia de la COVID-19 lo cambió todo. También para Lymbus. En pocos días pasamos de disfrutar del aire libre a vernos obligados a quedarnos en casa. Nos quedamos sin nuestro gran motor: el outdoor. No podíamos salir de casa y las consecuencias fueron las imaginables: se cancelaron eventos apalabrados, presentaciones, grabaciones, etc. Y nos hicimos la gran pregunta: ¿Cómo una agencia especializada en outdoor puede adaptarse en un contexto indoor?
Calma. Esa es la mejor receta para apaciguar los nervios. Y así fue cómo pusimos en valor nuestra gran misión como empresa: hacer llegar el outdoor a cuanta más gente mejor. Y lo hicimos con dos activos clave de nuestra actividad: las historias de los atletas Lymbus y contenido inspiracional del mundo outdoor. No podíamos disfrutar del aire libre, pero teníamos las herramientas para que el outdoor entrara en casa.
El reencuentro con una vieja amistad
La conectividad actual nos echó un cable. Por suerte, la pandemia estalló en la era digital. Podíamos conectar con facilidad con nuestro público objetivo que, al estar en casa, tenía tiempo para consumir nuestros contenidos. Cayeron proyectos y, para parar el golpe, reactivamos una amistad que antes de la pandemia teníamos algo arrinconada: nuestros documentales.
En los últimos años, como agencia hemos potenciado la creación de contenido propio a través de las historias de nuestros atletas. Es el caso de los documentales de Kilian Jornet (Summits of My Life, Path to Everest, Inside Kilian Jornet).
Antes de la crisis, el ritmo frenético del día a día no nos permitía dedicarle las horas que deseábamos para potenciar este tipo de contenido. Con el confinamiento, pensamos: ¿y si nos reencontramos con una vieja amistad?
Se cumplió el tópico y de una crisis salió una oportunidad. Hicimos una deducción: la gente está confinada en casa, tiene más tiempo para consumir productos audiovisuales...y nosotros podíamos cubrir esta necesidad con algunos de los documentales outdoor que habíamos producido en los últimos años.
¡Activamos el plan Boom! Durante dos meses trabajamos en equipo para promocionar los documentales de nuestros atletas. Relanzamos los documentales con un plan de marketing cuyo objetivo era aumentar los ingresos y las visualizaciones de estos productos propios.Trazamos un plan estratégico e ideamos unas acciones para acercar el outdoor a casa.
El mismo día en que se anunciaba el Estado de Alarma se nos encendió una luz. Aunque lo que más nos gusta es vivir nuevas aventuras al aire libre, las circunstancias actuales nos obligaban a pasar más tiempo en casa. Para hacer el momento más llevadero, ofrecimos de manera gratuita las películas del proyecto Summits of My Life de Kilian Jornet : A Fine Line, Déjame Vivir y Langtang durante una semana.
Además, durante el mes de mayo cada semana se realizó una acción digital para rememorar la efeméride del doble ascenso. Entre ellas: contenido explicando la filosofía Fast & Light, videoconferencia especial de Kilian para 20 de sus seguidores y una proyección gratuita de Path to Everest con comentarios de los directores a todos aquellos que se suscribieran a la Newsletter de Kilian.
Y con estas acciones conseguimos unos resultados notables. Incrementamos la base de datos un 170%, mientras que las visualizaciones bajo demanda aumentaron un 110% con respecto al periodo marzo-mayo del año 2019.
Poner en valor a nuestros atletas
Los atletas son nuestro gran valor como agencia y durante el confinamiento lo fueron todavía más. Teníamos libertad y tiempo para pensar historias que, en el día a día, quizá se nos habían pasado por alto.
Con Oriol Cardona pensamos una historia que tuvo una buena aceptación con un total de 15 apariciones en medios de comunicación. En un contexto en el que un atleta no puede participar en competiciones ni practicar deporte al aire libre, pensamos: ¿qué puede contar en las redes sociales y qué historia podemos explicar en prensa? Y descubrimos que Oriol aprovechaba el confinamiento para recuperar una de sus aficiones: el piano. la historia se publicó en medios como el Diario AS, el Diari ARA y TVE.
También con la atleta Emelie Forsberg ideamos contenido una vez se inició la desescalada. El objetivo: poner en valor aquellas pequeñas cosas (‘The small things in life’) que tanto habíamos echado de menos durante el confinamiento. Teníamos la idea pero no podíamos grabar contenido nuevo, ya que el movimiento entre países todavía era muy limitado. Lo que hicimos fue aprovechar imágenes de archivo de Emelie, que puso la voz para el vídeo. Este fue el resultado.
La nueva normalidad con las marcas
Cambió el contexto también para las marcas, que tenían nuevas necesidades de comunicación. Como agencia pusimos a su disposición ideas en un momento de pandemia. El coronavirus nos obligó a potenciar todavía más la creatividad.
Y, como ha sido habitual en esta etapa, nos hicimos otra pregunta: ¿Qué historias podemos explicar relacionadas con el deporte y las marcas con las que trabajamos? Suunto, Salomon, Strava son algunas de ellas. Compañías referentes del sector que dependen del outdoor en un momento en el que no se podía salir de casa. Paradójico, ¿verdad? Fue entonces cuando decidimos dar salida a historias con los datos como protagonistas. Así, podíamos explicar cómo era la práctica deportiva durante el confinamiento.
Con Strava, la red social para deportistas, aprovechamos los datos de flybys, una herramienta pública que cualquier usuario puede consultar. Fuimos rápidos y, tras el primer fin de semana de desescalada, exportamos los vídeos específicos de las principales ciudades de España (Barcelona, Valencia, Madrid, Bilbao, San Sebastián, Vitoria). En cada vídeo, demostramos que los usuarios de Strava no solo estaban sedientos de practicar deporte tras dos meses de confinamiento, sino que cumplían los horarios establecidos por el Gobierno. Una historia que se presentó en cuatro televisiones del Estado: Cuatro (Estatal), TV3 (Cataluña), A punt (Comunidad Valenciana) y EITB (Euskadi).
Win win en tiempos de crisis
Más allá de los resultados, la crisis de la COVID-19 ha significado para nosotros un aprendizaje constante. En primer lugar, porque nos obligó a reaccionar en un momento límite. Nos pusimos en marcha, y con creatividad y trabajo en equipo, intentamos sortear las dificultades que nos encontramos por el camino.
En poco tiempo, descubrimos que no nos dan miedo los retos en un contexto ya no líquido, sino gaseoso. Cada día sucedía algo nuevo. Por ello, sin capacidad de reacción hubiera sido imposible. Por una parte, conseguimos que nuestra comunidad disfrutara de contenido outdoor de calidad en un momento complicado. Además, pudimos comunicar sobre los atletas, pese a la cancelación de todas las competiciones, y no dejamos de dar apoyo a las marcas que en los últimos años han confiado en nosotros para explicar sus proyectos.
Todo ello sin olvidar una decisión que ha cambiado nuestra manera de trabajar. Desde el pasado mes de mayo trabajamos en remoto, sin oficina fija. Descubre nuestra nueva filosofía aquí.